Stella Liebeck es una viejita que se derramó encima el café en un McDonalds y luego tuvo la cara de demandar a la empresa por los daños que se ocasionó. Lo gracioso es que ganó el juicio. En su honor se han creado los Premios Stella que recogen las demandas más absurdas del sistema jurídico americano (gracias Toledein)