¡Oh cielos! ¡No puede ser cierto! ¡No se puede ser tan friki! ¡Qué digo friki! ¡No se puede ser tan... tan... gilipollas! A ver, os lo explico. Si no podeis ver imágenes desagradables, mejor olvidad este link. Se trata un tipo que se injecta agujas en la cara y la infla hasta quedar como el hombre elefante (¡joder, qué asco!) (geisha asobi)